miércoles, 30 de mayo de 2012

Al desnudo, de Chuck Palahniuk


Todo transmite una sensación de aislamiento y de silencio tan intensa que casi parece que estés durmiendo bien arropado en las profundidades de la vagina de Mae West.

Chuck Palahniuk ha vuelto. Y aunque en esta ocasión se muestra más light y comedido que de costumbre, no puede evitar caer en sus gráficas frases: La saliva le sabía a las pollas húmedas de diez mil camioneros solitarios.


Hazie Coogan trabaja al servicio de la gran estrella cinematográfica Katherine Kenton. Es una canguro de famosos, en descripción de la novela (¿Existirán de verdad? Parecen plausibles). De hecho, ella considera (es la narradora) a Katherine como una creación suya. En un mundo en el que el tiempo se mide en maridos o en perros, Hazie manipula todo lo concerniente a la actriz.

Pero un amante joven entra en escena. Para Hazie, es solo una estratagema para vender un libro sobre la estrella porque Todos estos futuros superventas ya están escritos y solo les hace falta que alguien se muera. Kenton se encuentra con el libro en el que descubre la muerte que ella va a sufrir muy pronto así que su obsesión, y la de Hazie, es encontrar los siguientes borradores para anticipar el asesinato.

En estos borradores se encuentra el Palahniuk más humorístico porque el lector sonríe cuando lee fragmentos como El último día de la vida de Katherine Kenton, golpeé muy suavemente la proa de mi dolorida canoa del amor contra los pliegues nudosos de su pasadizo prohibido o Webster, cariño, los litros de esencia de amor que chorreas en el clímax de la pasión oral tienen un sabor más embriagador que si me estuviera atacando con el más delicioso de los chocolates europeos. También incluye alguna buena reflexión “marca de la casa”: No hay ser humano que no busque o bien una razón para ser bueno o bien excusas para ser malo.

El autor usa la terminología de un guion (los capítulos se presentan como ACTO X, ESCENA Y); la jerga cinematográfica (Hagamos aquí un lento fundido para indicar un flashback); y cientos de comparaciones con actores o actrices del Hollywood clásico del que hay que tener un conocimiento enciclopédico para situar todos los nombres. En esta ocasión, el exceso formal consiste en  aplicar la negrita a los nombres propios simulando una revista e incomodando un poco la lectura. En la novela anterior, Pigmeo, tachaba palabras.

Los intentos de asesinato se vuelven más y más delirantes. Imitando el libro, se puede comparar con la torpeza de Peter Sellers en su personaje de Clouseau o en su película El guateque. Hay algo de visión lisérgica, la descripción de films ficticios se funde con la realidad; y algo de Dorian Grey invertido, en un espejo talla las arrugas que luego se hace quitar.

La cierta sorpresa en el giro final añade algún punto a una novela que, sin embargo, no logrará opacar la fama de la primera obra de Palahniuk. Y eso que nadie habla del club de la lucha.



miércoles, 2 de mayo de 2012

Último inventario antes de la liquidación


Título robado de un divertido ensayo literario (al lado de Camus aparece Astérix) de Frédéric Beigbeder, un tipo que, más pronto que tarde, asomará su nariz, grande y aficionada a la cocaína, por aquí. La idea, que lo mismo comienza o lo mismo termina en esta entrada, es comentar de forma breve varios temas. En esta ocasión, formulando una serie de preguntas. A ver qué tal queda.

EL BAR DE LA HONRADEZ
 
En la última novela del inventor del cyberpunk, William Gibson, nos encontramos con el bar de la honradez. Esta es la nota explicativa del traductor Rafael Marín:

Equivalente al minibar de las habitaciones de hotel, pero en un lugar reservado en el vestíbulo. Sin camarero que atienda, se confía en la honradez de los clientes para que anoten la factura de lo consumido. Al parecer, funciona.

¿Y por qué no iba a funcionar? ¿Quiere el traductor apuntar que en algún sitio la gente no es lo suficientemente honrada para tener un bar de estas características?

SWEENEY TODD ES UN BROKER DE LOS 90 

Los Simpsons tienen parodias para todo. Veamos una:

Otro axioma: Cualquier historia es supcetible de ser convertida en un musical. Hace unos días se leía la noticia: la novela American Psycho se estrenará como musical.

Puedo pensar en una pieza sobre las tarjetas de visita pero ¿y aquella parte en la que el protagonista introduce una rata hambrienta en la vagina de una mujer? Imaginemos un decorado que simula las piernas separadas de una mujer. Entre ellas un tubo del que sale una persona disfrazada de roedor cantando "Y me pregunto si esto será lo más profundo que te voy a conocer jamás" como Nacho Vegas.

EL REY SIN CORONA

El premio Pulitzer de literatura 2012 ha quedado desierto. El anterior será una de las novelas que encabezarán las listas de “Los mejores” en España en 2012 (El tercer lunes dixit).
 
Este año las apuestas apuntaban hacia David Foster Wallace y su póstuma El rey pálido. ¿Por qué no se premió a esta o a alguna de las dos finalistas? ¿No se quería premiar a El rey pálido por lo extraño de su concepción? Foster Wallace se suicidó, su viuda encontró la novela inacabada que fue finalizada por los editores. ¿No se han puesto de acuerdo y ante la falta de unanimidad han optado por no premiar a ninguno?

Un miembro del jurado apunta que los fans leerán tres libros en lugar de uno. Quizás.